Tentaciones

Odio los lunes. A pesar de dar mis dos asignaturas favoritas… los odio. Y bueno, teóricamente ahora debería estar haciendo las tropocientasmil cosas que tengo para mañana, pero empezaba a agobiarme y he decidido hacer un descansito para merenar.

A pesar de ser lunes (y odiarlo por el mero hecho de serlo), no ha sido un mal día. Hasta ahora, al menos *RISA NERVIOSA*. He descubierto que mi profesora de Traducción me tiene en consideración. Explico: hoy la clase se ha alargado (una vez más. Porque esta profesora tiene una tendencia sobrehumana a explicarnos su vida; y claro, las clases se quedan cortas. ¿Solución? Ella acaba cuando le da la real gana.) y hemos pasado a poner en común más traducción de la que teníamos preparada para clase. Cuando le hemos dicho que no teníamos más se ha sorprendido. Y de repente, se vuelve hacia una compañera y hacia mí y nos dice: ¿¡Vosotras tampoco!? Entiendo que estos pendones no lo hayan hecho, ¿pero vosotras? *INSERTAR MI MEJOR CARA DE ¿¡EING!?* XD No sabía que me tenía en tan alta consideración, la verdad.  

Cambio de tema. Ayer me volvió a visitar mi YO devorador de libros. Hacía meses que estaba desaparecida. Supongo que se le atragantaron las lecturas para la universidad y ha estado unos meses con el estómago revuelto. (*JUAS* Pues ya verás cuando empiece con los otros que me han mandado ahora…) Tengo mil y una prácticas que hacer, pero cuando me entra el mono de lecturas… no puedo resistirme a la tentación. ¿Resultado? Hoy me he pasado por el FNAC y he salido de allí con dos libros.   

Sin dinero ni tiempo libre (y con los exámenes a la vuelta de la esquina) y me voy a comprar libros; que para más inri me llaman muy persuasivamente para que los lea. *OH SHIT!*