RESEÑA. Lauren Kate: Oscuros

Título: Oscuros (“Fallen”)

Colección: Ángeles Caídos I  

Otros libros de la colección: (conocido hasta el momento):

            · Ángeles Caídos II: “Torment” [28 de septiembre 2010 en EUA]

            · ¿Precuela? [Verano 2011]

            · Ángeles Caídos III: ¿? [Enero 2012]

Autor: Lauren Kate

Traductor: Alfonso Barguñó

Editorial: Montena

Idioma: Español

Páginas: 413

Sinopsis: Helston, Inglaterra, 1853.

En noche cerrada y dos jóvenes conversan en una remota casa de campo. Se sienten irresistiblemente atraídos el uno por el otro, pero él insiste en que no pueden estar juntos. Ella desatiende sus advertencias y se acerca a él, con paso lento y desafiante.

Cuando se besan, el tiempo se detiene, y un silencio furioso e infinito lo inunda todo…

Mi opinión:

Se me hará duro reseñar este libro sin sucumbir a la tentación de caer en spoilers. Pero no temáis. Leed, yo me muerdo la lengua para que vosotros podáis disfrutar de la lectura.

—¿Qué haces cuando vienen, papá? ¿Por qué no te dan miedo los monstruos?

Lucinda Price (Luce) es una adolescente un poco sosa y con un gusto sobre los hombres más que cuestionable que ve cómo su vida se desmorona poco a poco y sin poder remediarlo; un eterno camino a la oscuridad. Tras un misterioso incidente que no puede o quiere recordar, Luce es internada en el reformatorio Espada & Cruz. Pero hay otro motivo por el que está allí y que no puede contar a nadie: Luce ve sombras que la acechan y parecen ser las causantes de todas sus desgracias. ¿Parece motivo suficiente para llevarla a un reformatorio, verdad? Lo siento, bonita.

Luce siente que no encaja en Espada & Cruz, se siente una extraña… hasta que encuentra un rostro que le resulta vagamente familiar: Daniel Grigori. A partir del mismo momento en que le ve por primera vez, Luce será incapaz de hilvanar dos pensamientos sin que el nombre de Daniel haya aparecido 500 millones de veces. Que levante la mano todo aquel que esté pensando en el síndrome Bella Swan. *levanta la mano* Pero Luce lo tendrá complicado para llegar hasta él; no es fácil acercarse a alguien que no pierde oportunidad de lanzarte ofensas cuando te ve y, el resto del tiempo, hace todo lo posible por evitarte. Un chico encantador, ¿verdad?

Por suerte allí está mi queridísimo y guapísimo Cam para atenderla. Por una extraña alineación de los planetas (porque si no no me lo explico), Cam se siente inmediata e intensamente atraído por Luce. Atento y siempre disponible, Cam amenizará ligeramente la estada en Espada & Cruz. A pesar de todas las atenciones del joven, Luce parece no poder concentrarse en nada que no sea Daniel, su atractivo y su actitud respecto a ella. Chica, espabila.

—Déjame compartir contigo mi lema sobre las clases de Espada & Cruz: más vale nunca que tarde.

Podríamos decir que tres cuartas partes del libro se centran en la indecisión de Luce, la encantadora actitud de Daniel Grigori y los intentos de aproximación de Cam. Durante estas más de 300 páginas no pude evitar que la historia me pareciera lenta e insulsa. En mi opinión, sobran páginas, sobran capítulos enteros y sobra indecisión de Luce. Haría falta un leve soplido que hiciese volar estas muchas palabras de más. Mucha letra para contarnos la misma historia de siempre.

Pero entonces, de un capítulo para otro, todo cambia. Daniel se vuelve un chico encantador (¿será bipolar?) y Cam parece decaer un poco —don’t worry, después vuelve aún más deslumbrante y… ♥ y me muerdo la lengua, vale. Lauren Kate decide que es el momento de ir levantando una a una las cartas ocultas entre líneas. Nada es lo que parecía ser. Nadie está libre de culpa. Y, al fin, hay acción. ¡Y cuánta acción! Bien podemos cerrar los ojos cuando la autora nos echa una cucharada de azúcar de más (para mi gusto) y concentrarnos en la pelea. Y es aquí cuando me muerdo la lengua y maldigo en silencio la lagrimilla que me ha robado la escritora en ese momento, en ese párrafo tan repentino e inesperado. Pero yo me muerdo la lengua y me callo esto y muchos otros detallitos.

Yo he decidido quedarme con esas últimas 100 páginas del libro, con mi renacido amor por Cam y un epílogo que me ha en-can-ta-do. Y aunque había decidido no hacerme con la continuación, en el último instante Lauren Kate me ha convencido que ésta puede ser la primera parte de algo interesante.

En resumen, crucemos los dedos para que esa primera parte del libro quede en el olvido y Lauren Kate siga con el rumbo iniciado en el desenlace.

—No puedo permitirme el lujo de pensar seriamente en otro lugar. Espada & Cruz es —hizo una pausa— prácticamente mi último intento desesperado.

—Vamos —dijo Daniel.

—No tienes ni idea…

—La tengo. —Suspiró—. Siempre hay otra parada, Luce.